GASOMETRO II
Máquina de los Sueños
Project Description in Spanish
La escuela del Gasómetro, « máquina de los sueños »
Las antiguas baterías de Cok es el lugar de las posibilidades para la región de Asturias: las industrias pesadas de Avilés dan paso hoy a las industrias ligeras, de programación, gestión y mantenimiento de máquinas, las nuevas tecnologías, así como todos los servicios relacionados con la economía - de medios y medioambiental - del sector terciario. Los lugares de producción de materia prima del siglo XX se convierten en lugares multidisciplinares, de producción de conocimiento e innovación en el siglo XXI.
Situado cerca de la parada de tren de Llaranes, el gasómetro es visible y accesible por cualquier medio de transporte, desde el centro y los barrios residenciales de la ciudad. El gasómetro es la puerta de entrada simbólica del barrio y, bajo esta nueva visión urbana, debe volver a ser una figura activa y atractiva, complementaria a los usos ya existentes.
Programa y sostenibilidad
Las dimensiones actuales del gasómetro invitan a un uso interior que aprovecha la gran altura del edificio y para el que no es esencial la entrada constante de luz natural para su funcionamiento y el confort de sus usuarios.
Somos conscientes del reto actual —el atractivo y el mantenimiento del edificio— que suponen los programas museísticos, así como de la presión a la que se ven sometidas estas instituciones en su misión de renovar constantemente las exposiciones, garantía de rentabilidad y, por tanto, de sostenibilidad. En este caso, la renovación del gasómetro es una oportunidad para que Avilés defienda un programa que no sea exclusivamente «turístico». Queremos proponer un lugar de aprendizaje y de intercambio cultural, sostenible porque forma parte integrante de la vida del nuevo barrio, un valor añadido para Avilés y para el prestigio de su región. Más que un «destino», el gasómetro debe convertirse en un marco de vida y de experiencia para todos. En este sentido, nuestra elección de programa se orienta hacia un lugar de formación: una escuela.
Tras estudiar las instituciones culturales españolas y, en particular, las escuelas de artes escénicas, nos damos cuenta de que las regiones del norte de España no cuentan con una entidad de formación para las nuevas generaciones de artistas acróbatas, coreógrafos, escenógrafos y actores del espectáculo en vivo español. Una escuela de artes circenses como entidad pública nos parece un programa ambicioso para la región de Asturias y una propuesta cívica notable en el contexto de la rehabilitación del Gasómetro de Avilés, que ofrece una mezcla inesperada a las baterías de Cok.
Inscribirse en el gasómetro
La envolvente del gasómetro es una piel metálica muy fina detrás de la cual se implanta con discreción la nueva escuela. En planta, un cuadrado de 30 metros de lado se inscribe en el polígono regular de 20 lados y da una orientación clara norte-sur y este-oeste al nuevo edificio. En sección, la nueva construcción deja el máximo volumen libre para preservar el patrimonio y facilitar su contemplación.
Flexibilidad y temporalidad
El programa de una escuela de circo es similar al de un complejo deportivo o un gimnasio: requiere espacios interiores con la máxima flexibilidad y, por lo tanto, superficies libres. La gran altura del gasómetro permite superponer cuatro volúmenes «altos» —una plaza pública, dos salas de entrenamiento y un circo— unidos entre sí por volúmenes «bajos» —aulas teóricas, vestuarios, aseos, almacenes, etc. En la parte superior, el circo consiste en un escenario circular cuyos accesos, gradas y pista están diseñados de tal manera que respetan y realzan el disco del gasómetro. Este espacio ofrece una vista en contrapicado del patrimonio arquitectónico renovado que, combinado con los juegos de luces y los movimientos de los cuerpos en representación, promete una experiencia que solo la imaginación podrá limitar.
La escuela en el gasómetro tiene un fuerte componente social. Se convierte en el lugar de todas las reuniones posibles en Avilés, permitiendo la actividad del público durante el día, la noche, la semana y el fin de semana: actividades extraescolares, espacio para exposiciones y conferencias para la promoción de empresas del barrio, salas de proyección y teatro, lugar de encuentro, salas de espectáculos nocturnos, etc. Todo uso es posible.
Parque para las baterías de Cok
Dentro de su parcela, el gasómetro está concebido como el pabellón de un espacio verde en las antiguas baterías de Cok. Una plaza circular mineral y permeable situada al noroeste del gasómetro está rodeada por una alfombra vegetal y una pantalla de árboles de gran altura en el perímetro para atenuar las molestias acústicas y visuales de las industrias adyacentes. El parque del gasómetro se convierte en un destino para el almuerzo de los trabajadores del barrio, una parada cultural para los paseantes de Avilés y otros lugares, y una zona de entrenamiento al aire libre para los estudiantes de la escuela de circo. El parque está concebido como una continuidad paisajística urbana desde el centro cultural Oscar Niemeyer y complementa, por la otra orilla, la prolongación verde del paseo de la ría de Avilés.
Acceso
La entrada principal de la escuela está orientada al norte y el acceso logístico se encuentra al este. Una incisión en la envolvente marca la apertura del edificio existente y da acceso, a través de una «enorme puerta», al núcleo que da servicio a todas las salas. El acceso técnico reservado a la carga y descarga de mercancías (decorados, material de entrenamiento, etc.) está orientado al este y da directamente a la plaza pública cubierta creada por la nueva escuela (posible lugar de exposición).
Estructura y circularidad
El metal es el material histórico y característico del barrio de las baterías de Cok. Permite el ensamblaje de elementos secos, modulares, ligeros y capaces de soportar cargas de grandes vanos. También recuerda las estructuras tubulares utilizadas como soporte de las carpas de los circos móviles tradicionales. De hecho, la nueva escuela (estructura y núcleo de circulación) está concebida como una construcción metálica, montada in situ, con la mayor medida posible de producción local y reutilización de elementos, con el fin de limitar al máximo el impacto medioambiental de la propuesta. Los forjados son de madera colaborante.
El módulo estructural del nuevo edificio es de 6 x 6 metros para dividir el nuevo edificio en 25 módulos de 36 m² cada uno. La organización de espacios interiores y entreplantas es posible gracias a la subdivisión de los volúmenes «altos», para crear los volúmenes «bajos».
Instalaciones
El gasómetro es un volumen ciego y opaco. La decisión de perforar esta «piel» de forma sistemática (cerca de los balcones técnicos) permite la entrada de luz según el recorrido del sol, al tiempo que refuerza desde el exterior una imagen sobria e industrial de la envolvente. La referencia a la Dreamachine (1959) de Brion Gysin (1916-1986) se aplica a la envolvente del gasómetro para crear un nuevo lenguaje, un juego de luces perceptible desde el interior. La ventilación natural en el techo y en el disco del gasómetro se combina con un grupo mecánico aerotérmico de calefacción/refrigeración para garantizar el confort interior durante todo el año. El volumen comprendido entre la fachada existente y la fachada de la nueva escuela actúa como un colchón térmico intermedio y amortiguador.
El forjado inferior del disco sirve para dividir el volumen del gasómetro en dos sectores principales en caso de incendio: la escuela (docente) y el circo (pública concurrencia). Como medida preventiva, se prevé el uso de sistema de control de humo y sistema de protección contra incendios (sprinklers) para todos los espacios.
Project Ideas Competition for the architectural Intervention in the “Coke Batteries Gasometer II, ENSIDESA, Avilés for its possible Reuse
Year 2025
Location Avilés, Spain
Client Ayuntamiento de Avilés
Architect UTE Fernando Alonso Tuero (ATUERO Architects) & Mickael Pelloquin (excessus studio)